La mancha negra, causada por Guignardia citricarpa, es una de las principales enfermedades que afectan a los cítricos.

Se sabe que la radiación UV-C tiene potencial para usarse como un método alternativo para complementar o reemplazar el uso de fungicidas, especialmente porque promueve la resistencia contra los patógenos.

Se han evaluado  los efectos in vitro de la radiación UV-C en el desarrollo de G. citricarpa y en el control de la mancha negra en poscosecha de naranja.

Además, se evaluaron los cambios en el color de la piel de la fruta como resultado del tratamiento UV-C.

El crecimiento del micelio, la germinación de conidios y la formación de apresorios se evaluaron in vitro después de la exposición del hongo a diferentes dosis de irradiación.

Además, naranjas ‘Valencia’ naturalmente infectadas fueron sometidas a diferentes dosis de irradiación para comprobar la posibilidad de control in vivo. Los frutos se almacenaron a 25ºC/80% HR y se evaluaron a los 3, 7, 10 y 14 días después del tratamiento y se calculó el área bajo la curva de progreso de la enfermedad.

La radiación UV-C afectó la germinación de conidios de G. citricarpa y la formación de apresorios. 

La irradiación UV-C permitió que la incidencia de lesiones de manchas negras quiescentes fue menor en naranja ‘Valência’ poscosecha tratada. Las  dosis de UV-C no afectaron el aspecto visual de la fruta.

Por lo tanto, la radiación UV-C puede contribuir a la reducción de las pérdidas postcosecha causadas por la mancha negra de los cítricos y reducir el uso o las dosis de fungicidas en el control de enfermedades.